El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado que las fuerzas estadounidenses han interceptado y hundido una embarcación cargada de drogas procedente de Venezuela. La declaración, realizada desde la Casa Blanca, ha elevado la tensión entre Washington y Caracas, en un momento en que las relaciones bilaterales ya se encuentran en un punto crítico.
«Acabamos de disparar a un barco que transportaba drogas», afirmó Trump, destacando la importancia de esta acción para frenar el flujo de estupefacientes hacia Estados Unidos. El exmandatario insistió en que Venezuela es un punto clave de origen de estas drogas, señalando que «muchas cosas están viniendo de Venezuela».
En paralelo al anuncio de Trump, el secretario de Estado, Marco Rubio, informó a través de su cuenta en la red social X que la operación militar se llevó a cabo en el sur del Caribe contra una embarcación operada por una «organización narcoterrorista designada». Rubio enfatizó que el objetivo era una estructura identificada como una amenaza por las autoridades estadounidenses.
Este operativo se produce en un contexto de creciente tensión entre Estados Unidos y Venezuela. El régimen de Nicolás Maduro ha decretado un estado de «máxima preparación» ante lo que considera amenazas militares por parte de Estados Unidos. La administración Trump había acusado previamente a Maduro de liderar una red de narcotráfico y desplegó buques de guerra en el Caribe sur para combatir el tráfico de drogas.
Las declaraciones de Trump y Rubio han generado una fuerte reacción en Venezuela, donde el gobierno de Maduro ha calificado la acción como una agresión y una violación de su soberanía. Analistas políticos anticipan que este incidente podría exacerbar aún más las tensiones bilaterales, dificultando cualquier posibilidad de diálogo o negociación en el futuro cercano.
Más allá de la situación con Venezuela, Trump también abordó su relación con el presidente ruso, Vladimir Putin, expresando su decepción tras la cumbre que ambos sostuvieron en Alaska el pasado mes de agosto. «Estoy muy decepcionado del presidente Putin, puedo decirlo. Teníamos una gran relación, estoy muy decepcionado», señaló Trump, sin especificar qué medidas podría tomar contra Rusia.
Trump también minimizó la preocupación por un posible acercamiento entre Rusia y China, a pesar de la reunión entre Putin y el presidente chino Xi Jinping. «No estoy en absoluto preocupado», aseguró Trump, confiando en la fortaleza de las fuerzas armadas estadounidenses.
Mientras tanto, desde China, Putin afirmó que la administración estadounidense «está escuchando» las justificaciones rusas para la invasión de Ucrania, anticipando una posible continuación del diálogo entre ambos gobiernos.
El Kremlin enfrenta la posibilidad de sanciones estadounidenses si no se logran avances en los esfuerzos de paz en Ucrania. Las autoridades rusas informaron que Moscú y Washington planean una nueva ronda de contactos a nivel ministerial para abordar el conflicto. El asesor del Kremlin, Yuri Ushakov, declaró que «la siguiente ronda de consultas entre ministerios de Exteriores está ya planificada», mencionando la existencia de numerosos temas pendientes.
En resumen, el anuncio de Trump sobre el hundimiento de la embarcación de drogas procedente de Venezuela, junto con sus declaraciones sobre Putin y la situación en Ucrania, configuran un panorama complejo en la política exterior estadounidense, marcado por tensiones y desafíos en múltiples frentes.