Wall Street experimentó un notable repunte, con todos sus índices cerrando en terreno positivo. Este impulso se debió principalmente a dos factores clave: la decisión de la Reserva Federal (Fed) de reducir las tasas de interés y el anuncio de una inversión multimillonaria de Nvidia en Intel.
El S&P 500 y el Nasdaq, particularmente sensibles al sector tecnológico, lideraron las ganancias. Las acciones de Intel se dispararon, superando el 25% en las primeras operaciones, mientras que Nvidia también registró un incremento del 2,7%. El Dow Jones, por su parte, se mantuvo relativamente estable.
Kathleen Brooks, directora de investigación de XTB, señaló que el mercado recibió con entusiasmo la colaboración entre Nvidia e Intel, a pesar de las dificultades que enfrenta esta última. El acuerdo implica el desarrollo conjunto de chips para computadoras personales y centros de datos, un movimiento estratégico tras la adquisición por parte de Estados Unidos de una participación del 10% en Intel.
La decisión de la Fed de recortar las tasas de interés en 25 puntos básicos, el primer recorte del año, también influyó positivamente en el ánimo de los inversores. Si bien la reacción inicial fue mixta, el mercado ahora parece más confiado en que se producirán recortes adicionales en el futuro.
Según Fawad Razaqzada, analista de City Index y FOREX.com, los mercados anticipan que los responsables políticos seguirán priorizando el empleo sobre la inflación, incluso con los precios aún en aumento. La Fed, sin embargo, se mantiene cautelosa, adoptando un enfoque de «reunión a reunión», según declaró su presidente, Jerome Powell. Existe división dentro de la Fed sobre la magnitud de los futuros recortes de tasas.
En Europa, las bolsas de París y Frankfurt también mostraron un sólido desempeño, impulsadas por la perspectiva de que Alemania evitará una recesión técnica. Londres, por otro lado, tuvo un comportamiento más moderado, ya que el Banco de Inglaterra mantuvo su tasa de interés principal en el 4% ante la persistente inflación en el Reino Unido, que se sitúa en el 3,8%.
Andrew Bailey, gobernador del Banco de Inglaterra, enfatizó que, si bien se espera que la inflación vuelva al objetivo del 2%, cualquier recorte futuro deberá realizarse de forma gradual y cuidadosa. En contraste con la postura del Banco de Inglaterra, el banco central de Noruega sí recortó los costos de financiación, siguiendo una medida similar adoptada por Canadá.
En Asia, los mercados mostraron cautela. Las acciones de Shanghái retrocedieron, y Hong Kong también cerró en rojo. Tokio, sin embargo, finalizó la jornada en positivo, impulsado por la depreciación del yen frente al dólar, lo que benefició a los exportadores japoneses.
En resumen, la jornada bursátil global se caracterizó por una tendencia alcista, impulsada por factores como la relajación de la política monetaria por parte de algunos bancos centrales y la colaboración estratégica entre gigantes tecnológicos como Nvidia e Intel. Sin embargo, la cautela persiste en algunos mercados, ante la incertidumbre sobre la evolución de la inflación y las futuras decisiones de los bancos centrales.