Un informe bipartidista del Congreso de Estados Unidos ha calificado a la empresa china de inteligencia artificial DeepSeek como una «amenaza profunda» para la seguridad nacional. El Comité Selecto de la Cámara sobre el Partido Comunista Chino acusa a DeepSeek de servir como conducto para la recopilación de inteligencia militar, desviando datos de usuarios estadounidenses hacia Pekín y operando con tecnología restringida por controles de exportación de Washington.
La investigación del Comité reveló que DeepSeek mantiene vínculos directos con el Ejército Popular de Liberación (EPL) de China, con investigadores de la empresa participando en 396 proyectos de IA financiados por el EPL, incluyendo trabajos relacionados con armas nucleares. Además, su modelo de IA R1 se ha desplegado en hospitales militares chinos para planificación de tratamientos y apoyo diagnóstico, y también ha sido adoptado por la Policía Armada del Pueblo para operaciones de seguridad interna.
Diversas agencias federales estadounidenses han tomado medidas para limitar el uso de productos de DeepSeek. En enero, el Departamento de Defensa bloqueó la aplicación en sus redes, la NASA prohibió su uso en el tratamiento de datos, y la Marina de Estados Unidos emitió una prohibición total para su personal, citando riesgos de seguridad y preocupaciones éticas. A nivel estatal, el Fiscal General de Texas inició una investigación calificando a DeepSeek como un proxy del Partido Comunista Chino para socavar la supremacía estadounidense en IA.
OpenAI también ha acusado a DeepSeek de utilizar métodos ilícitos para entrenar sus modelos, evadiendo salvaguardas y accediendo a capacidades de IA desarrolladas en Estados Unidos, lo que representa una violación de protocolos de seguridad. En una carta a la Casa Blanca, OpenAI advirtió que aunque Estados Unidos mantiene una ventaja tecnológica en IA, esta se está reduciendo debido al avance de China mediante métodos considerados desleales por la industria estadounidense.
DeepSeek fue fundada en 2023 por Liang Wenfeng y ha logrado posicionarse como un actor relevante en el mercado global de IA, con un modelo R1 que compite con los principales sistemas estadounidenses, pese a haber sido entrenado con un presupuesto mucho menor (6 millones de dólares frente a los 100 millones de GPT-4 de OpenAI). Esta gran discrepancia ha generado dudas sobre sus métodos de desarrollo y sospechas sobre accesos irregulares a tecnologías restringidas o datos sin autorización.
En resumen, el informe del Congreso estadounidense señala a DeepSeek como una amenaza profunda para la seguridad nacional por su vinculación con el ejército chino, su uso de datos estadounidenses desviados a China, y su posible evasión de controles tecnológicos, lo que ha provocado restricciones federales y una fuerte controversia en el sector tecnológico.