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La ministra de Trabajo y Desarrollo Laboral (Mitradel), Jackeline Muñoz, ha emitido una seria advertencia al sindicalista Francisco Smith, acusándolo de intentar obstaculizar las negociaciones en curso para el retorno de la empresa Chiquita Panamá a la actividad bananera en el país.
Las declaraciones de la ministra se producen en un momento crítico, en el que el gobierno panameño busca reactivar la economía de la región, fuertemente golpeada tras la salida de la empresa frutera. Chiquita Panamá, una vez pilar fundamental de la economía local, cesó sus operaciones hace algunos años, dejando a miles de trabajadores sin empleo y generando un impacto socioeconómico significativo.
El gobierno ha estado trabajando arduamente para facilitar el regreso de la compañía, buscando crear un clima de inversión favorable y garantizar el cumplimiento de las leyes laborales. Sin embargo, las acciones legales emprendidas por el sindicato liderado por Francisco Smith contra Chiquita Panamá han generado preocupación en el ejecutivo, que teme que estas acciones puedan entorpecer las negociaciones y frustrar el esperado retorno.
«Entendemos y respetamos el derecho de los trabajadores a defender sus intereses, pero debemos actuar con responsabilidad y visión de futuro«, declaró la ministra Muñoz. «Las acciones legales interpuestas en este momento, podrían generar un ambiente de incertidumbre que dificulte la llegada de Chiquita Panamá y ponga en riesgo la creación de miles de empleos que tanto necesita nuestra gente».
La ministra enfatizó que el gobierno está comprometido con la defensa de los derechos laborales, pero también con la reactivación económica del país. «Estamos trabajando para lograr un acuerdo justo y equitativo que beneficie tanto a los trabajadores como a la empresa», afirmó. «Pero es fundamental que todas las partes involucradas actúen con buena fe y eviten acciones que puedan perjudicar el proceso de negociación».
La advertencia de la ministra Muñoz ha generado un debate en el ámbito laboral y político del país. Algunos sectores han respaldado las declaraciones de la ministra, argumentando que el regreso de Chiquita Panamá es crucial para la recuperación económica de la región. Otros, en cambio, han criticado la postura del gobierno, acusándolo de ceder ante las presiones de la empresa y de no defender adecuadamente los derechos de los trabajadores.
El sindicato liderado por Francisco Smith aún no ha emitido una respuesta oficial a las declaraciones de la ministra Muñoz. Se espera que en los próximos días se pronuncie sobre el tema y explique las razones que motivaron las acciones legales contra Chiquita Panamá.
El futuro del regreso de Chiquita Panamá sigue siendo incierto. Las negociaciones entre el gobierno, la empresa y el sindicato continúan, y se espera que en las próximas semanas se logren avances significativos. La ministra Muñoz ha reiterado su llamado a la cordura y al diálogo, instando a todas las partes a trabajar juntas para lograr un acuerdo que beneficie a todos los panameños.
