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El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, se reunió con representantes de navieras japonesas en Tokio para fortalecer el registro panameño de buques, destacando la seguridad y la digitalización total de los servicios. El encuentro subraya la importancia de Japón, donde 7 de cada 10 armadores utilizan la bandera panameña, representando el 41% del tonelaje japonés.
Mulino presentó la nueva estrategia del registro de buques de Panamá, enfatizando su visión de futuro basada en estándares internacionales de seguridad, eficiencia y sostenibilidad ambiental. Este enfoque es crucial para mantener el liderazgo global de Panamá en el registro de buques, especialmente considerando que el 66% de las nuevas construcciones navales provienen de Japón.
Durante la reunión, Mulino resaltó la trayectoria histórica del registro panameño, que se remonta a la década de 1920, y lo diferenció de otros registros que carecen del respaldo de un país. Anunció un ambicioso proyecto de modernización que integra el registro de buques en una estrategia marítima y logística más amplia, abarcando el Canal de Panamá y los puertos. Este plan busca optimizar la competitividad marítima del país y consolidar su posición como centro logístico global.
«Tienen un registro panameño que seguirá trabajando en beneficio de la comunidad marítima, en especial la japonesa», afirmó Mulino, reafirmando el compromiso de Panamá con la industria naviera japonesa.
Luis Roquebert, administrador de la Autoridad Marítima de Panamá (AMP), y Arnulfo Franco, director de Marina Mercante, complementaron la presentación de Mulino. Roquebert destacó la diversificación de servicios de la AMP y su capacidad para ofrecer soluciones integrales a clientes en más de 50 países, gracias a una red global de socios y una vasta experiencia técnica, jurídica y diplomática.
Franco profundizó en las nuevas estrategias del registro panameño, resaltando la transición hacia un enfoque de «calidad sobre cantidad». Esta estrategia se traduce en una flota más segura, una reducción significativa de accidentes, procesos 100% digitales, buques más modernos y una política activa para eliminar buques de alto riesgo del registro. Además, se están implementando inspecciones más rigurosas para garantizar el cumplimiento normativo de los buques que enarbolan la bandera panameña.
Franco enfatizó que la confianza de los principales armadores japoneses en Panamá se basa en la seguridad y la reputación que protegen sus inversiones y su carga. La nueva estrategia ha demostrado ser efectiva, con una disminución en la cantidad de siniestros y un aumento del 13% en el abanderamiento de naves de nueva construcción en comparación con el año anterior.
La reunión en Japón reafirma el compromiso de Panamá con la mejora continua de su registro de buques y su determinación de seguir siendo un líder global en la industria marítima, ofreciendo un servicio seguro, eficiente y tecnológicamente avanzado.
