Washington, D.C. – En una declaración contundente, la administración estadounidense ha acusado al régimen de Nicolás Maduro de liderar una de las redes de tráfico de cocaína más extensas a nivel mundial. La acusación forma parte de la Determinación Presidencial sobre los principales países de tránsito o producción ilícita de drogas para el año fiscal 2026, publicada este lunes y que incluye a Venezuela en la lista de naciones consideradas relevantes en esta problemática.
Este señalamiento, emitido por la Oficina de Asuntos Internacionales de Narcóticos y Aplicación de la Ley (INL), no es nuevo para Venezuela, que ha figurado en esta lista desde 2005. Sin embargo, la acusación directa a Maduro eleva significativamente la tensión entre ambos países. El documento oficial declara que «el régimen criminal del narcotraficante Nicolás Maduro, procesado, lidera una de las redes de tráfico de cocaína más grandes del mundo».
La administración estadounidense asegura que continuará buscando llevar a Maduro y a otros miembros de su régimen ante la justicia por sus crímenes. Además, prometen perseguir a organizaciones terroristas extranjeras venezolanas, como el Tren de Aragua, con el objetivo de expulsarlas del territorio estadounidense.
La designación se basa en evaluaciones de la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas (ONDCP) y el Departamento de Estado, que consideran factores geográficos, comerciales y económicos que facilitan el tráfico ilícito. Venezuela comparte la lista con países como Colombia, México y Perú, entre otros.
Este anuncio se produce en un contexto de crecientes tensiones diplomáticas entre Estados Unidos y Venezuela. Recientemente, se registraron dos incidentes militares en el Caribe, donde fuerzas estadounidenses actuaron contra presuntos narcotraficantes venezolanos, resultando en varias bajas. Estos eventos han tensado aún más las relaciones bilaterales.
La inclusión de Venezuela en esta lista y las acusaciones directas contra Maduro podrían acarrear consecuencias significativas en términos de sanciones y restricciones económicas. El gobierno estadounidense ha sido claro en su determinación de combatir el narcotráfico y responsabilizar a quienes considera que están involucrados en estas actividades ilícitas.
Además de Venezuela, la lista de países señalados incluye a Afganistán, Bahamas, Belice, Bolivia, Birmania, China, Colombia, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, India, Jamaica, Laos, México, Nicaragua, Pakistán, Panamá y Perú. La publicación de esta determinación subraya el compromiso continuo de Estados Unidos en la lucha contra el narcotráfico a nivel global.