En un contexto de creciente tensión entre Estados Unidos y Venezuela, la gobernadora de Puerto Rico, Jenniffer González, ha emitido una declaración contundente que ha captado la atención internacional. González afirmó que si tuviera la oportunidad de encontrarse con el presidente venezolano, Nicolás Maduro, lo entregaría a las agencias federales estadounidenses para reclamar la recompensa de 50 millones de dólares que el Departamento de Estado ofrece por su captura.
Las declaraciones de la gobernadora, hechas durante una entrevista en la emisora radial WKAQ 580, se producen en el marco de la postura firme de la administración estadounidense contra lo que denomina «carteles de narcotráfico» y su relación con el régimen venezolano.
Contexto de las Tensiones
González, quien ha mostrado un apoyo inquebrantable a las operaciones militares de Estados Unidos en el Caribe, ha defendido la realización de maniobras militares y el despliegue de aviones F-35 en la isla. La gobernadora ha calificado públicamente a Maduro como el «líder del cartel de Venezuela» y un «pandillero que utiliza la violencia» para infundir miedo.
Previamente, Maduro había respondido a las declaraciones de González al invitarla a «encabezar personalmente» una supuesta «invasión» a su país. La respuesta de la gobernadora es vista como una réplica directa a este desafío.
La recompensa de 50 millones de dólares fue anunciada por Washington por información que conduzca a la captura y enjuiciamiento de Maduro, quien enfrenta cargos en Estados Unidos por conspiración narcoterrorista y otros delitos relacionados.