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La República Popular China (RPCH) reafirmó este lunes su respaldo a la soberanía panameña sobre el Canal de Panamá, calificándolo como una “gran creación del pueblo panameño”. Estas declaraciones se producen en respuesta a las polémicas amenazas del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, quien sugirió exigir la devolución de la infraestructura al país norteamericano.
Mao Ning, vocera del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, expresó en una rueda de prensa el apoyo histórico y continuo de su país al pueblo panameño. “Siempre hemos respetado la justa lucha del pueblo panameño por la soberanía del Canal de Panamá”, afirmó Mao, destacando que desde los años 60, China ha mostrado su solidaridad mediante manifestaciones masivas en apoyo a la causa panameña.
Una señal de respaldo internacional
China subrayó su confianza en la administración panameña sobre el Canal, considerándolo un ejemplo de eficiencia que favorece la integración global. “Creemos que, bajo la eficiente gestión de Panamá, el canal continuará haciendo nuevas contribuciones a la facilitación de los intercambios entre diferentes países”, añadió la vocera.
Esta declaración se alinea con la postura del presidente panameño José Raúl Mulino, quien respondió a Trump asegurando que “cada metro cuadrado del Canal es de Panamá”.
Contexto de las tensiones
Las recientes declaraciones de Trump sobre las tarifas del Canal de Panamá han generado reacciones internacionales. Mientras el mandatario estadounidense calificó los costos de tránsito como «excesivos», Mulino defendió el derecho soberano de su país a gestionar la vía interoceánica según los acuerdos del Tratado Torrijos-Carter.
En este contexto, el apoyo de China refuerza la posición de Panamá en el escenario global, consolidando su soberanía frente a posibles injerencias. Además, resalta la creciente influencia de Beijing en América Latina como socio estratégico en temas diplomáticos y comerciales.
Panamá: un símbolo de resistencia
El respaldo diplomático de China se suma al apoyo expresado por otros líderes de la región, como la presidenta de México, Claudia Sheinbaum. Este panorama refuerza la unidad de las naciones latinoamericanas en la defensa de sus derechos frente a desafíos internacionales, reafirmando que el Canal de Panamá sigue siendo un símbolo de la soberanía panameña y su capacidad para gestionar una de las infraestructuras más importantes del mundo.
