Un grupo de catorce naciones miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) emitió este jueves una declaración conjunta rechazando la juramentación de Nicolás Maduro como presidente de Venezuela, calificando el acto como carente de «legitimidad democrática».
La coalición, que incluye a potencias regionales como Argentina, Estados Unidos y Canadá, exigió al gobierno venezolano restablecer el orden democrático y permitir una transición pacífica que respete la voluntad popular expresada en las recientes elecciones presidenciales.
La declaración, anunciada por la cancillería ecuatoriana, surge en medio de una crisis política donde el candidato opositor Edmundo González Urrutia, actualmente en el exilio, reclama haber obtenido el 70% de los votos según copias de actas electorales. En contraste, las autoridades electorales venezolanas proclamaron a Maduro ganador con el 52% de los votos, aunque no han publicado el escrutinio detallado exigido por ley.
Los países firmantes, entre los que se encuentran Chile, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Jamaica, Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay, también demandaron la liberación inmediata de todos los detenidos políticos.
Esta postura internacional representa un nuevo desafío diplomático para el gobierno de Maduro, cuya legitimidad es cuestionada por importantes actores regionales que exigen garantías democráticas y transparencia electoral en Venezuela.
La crisis se profundiza mientras la comunidad internacional aumenta la presión por una transición democrática en el país sudamericano, en un momento crucial para la estabilidad política regional.