El jurado ha emitido un veredicto de culpabilidad contra Hunter Biden, hijo del presidente Joe Biden, por tres delitos federales relacionados con la posesión de armas. Este caso ha generado una gran atención mediática y ha puesto en el centro del escenario nacional la lucha contra las adicciones y las implicaciones legales de ocultar información al adquirir un arma de fuego.
Según los cargos presentados, Hunter Biden mintió en un formulario de solicitud al negar su consumo de drogas, ocultando así su adicción en el momento de comprar un revólver en 2018. Este acto constituye un delito federal que podría acarrear hasta 10 años de prisión por cargo.
A pesar de las acusaciones, el presidente Biden ha descartado indultar a su hijo si es condenado, dejando la decisión final en manos de la jueza Maryellen Noreika. La sentencia podría tardar hasta 120 días, y aunque Hunter Biden no tiene antecedentes penales, enfrenta una posible condena máxima de 25 años de prisión.
Este juicio no es el único al que se enfrenta el hijo del presidente, ya que también está involucrado en otros casos relacionados con fraude empresarial. La situación legal de Hunter Biden ha capturado la atención nacional en medio de la campaña de reelección de su padre y la reciente condena de Donald Trump por cargos similares.