La alcaldesa de San Miguelito, Irma Hernández, ha lanzado un contundente llamado a la acción durante una tensa sesión del Concejo Municipal, exigiendo medidas extremas para combatir la creciente inseguridad en el distrito.
«La gente en San Miguelito no vive, sobrevive», declaró Hernández ante los concejales y representantes de la Policía Nacional. La alcaldesa pintó un sombrío panorama de un distrito etiquetado como «zona roja», donde los residentes viven en constante estado de alerta.
Hernández propuso una serie de medidas drásticas, incluyendo la militarización del distrito. «Si es necesario, traigamos a unidades de Alfa, Senafront, Senan y Linces», sugirió, haciendo referencia a diversas fuerzas de seguridad nacional.
La alcaldesa también enfatizó la necesidad de priorizar las inversiones en seguridad en San Miguelito para los próximos cinco años. Además, abogó por una depuración de las unidades policiales, demandando «unidades disciplinadas, serias, valientes y con coraje».
Entre otras propuestas, Hernández destacó la importancia de mantener las áreas limpias e iluminadas como parte de un enfoque integral de seguridad. También alertó sobre el aumento de hurtos de baterías de autos y los alarmantes índices de femicidios en la zona.
La alcaldesa concluyó haciendo un llamado a fortalecer la policía municipal y a redirigir los recursos hacia las zonas más problemáticas, en lugar de tareas menores como la vigilancia de canchas o escuelas.
Este enérgico discurso marca un punto de inflexión en la lucha contra la inseguridad en San Miguelito, planteando un debate sobre las medidas necesarias para restaurar la paz y la calidad de vida en el distrito.