Mientras Donald Trump cataloga a la Oficina de Protección Financiera del Consumidor (CFPB) como un «mecanismo de extorsión» y ordena detener su trabajo, los testimonios de ciudadanos comunes revelan una historia diferente: la de una agencia que ha devuelto casi 20.000 millones de dólares a consumidores afectados por prácticas financieras abusivas.
De $17 a miles de dólares: las victorias cotidianas de la CFPB
«Este es el núcleo de la protección del consumidor: alguien dispuesto a ayudar con cosas que son lo suficientemente pequeñas como para que nadie presente una demanda», explica Jonathon Booth, profesor de 34 años de Boulder, Colorado. Su caso ejemplifica la labor de la agencia: recuperó $17 de un cargo indebido por demora que su compañía de tarjetas de crédito se negaba a eliminar.
Para Nurit Baytch, una mujer discapacitada de Cambridge, la intervención de la CFPB significó recuperar $100 tras una disputa por daños causados durante un trabajo de eliminación de moho. «Los únicos a los que afecta son las grandes empresas que quieren maltratar a los consumidores», afirma.
Una agencia bajo ataque
Creada tras la crisis financiera de 2008 como parte de la Ley Dodd-Frank, la CFPB ha procesado más de 7,7 millones de quejas desde su fundación en 2011. Sin embargo, ahora enfrenta su mayor amenaza: la administración Trump ha ordenado detener casi todo su trabajo y ha iniciado despidos masivos.
Barbara Seese, una maestra jubilada de 71 años de Phoenix, describe a la agencia como «un héroe» después de que la ayudara a resolver un caso de acoso por cobradores de deudas que perseguían erróneamente a su padre de 95 años. «Fueron muy serviciales, me brindaron mucha información y fueron muy profesionales», recuerda.
Cómo funciona la protección al consumidor
El proceso de la CFPB es directo: una vez recibida una queja, la agencia la revisa y contacta a la empresa involucrada, que tiene 15 días para responder. En 2023, el 40% de los casos se resolvieron con algún tipo de compensación no monetaria, mientras que el 1,5% resultó en pagos directos a los consumidores.
«La resolución es el objetivo, pero no es el único beneficio de este sistema», explica Ruth Susswein, directora de protección al consumidor de Consumer Action. «El proceso en sí mismo ayuda a identificar problemas sistémicos que pueden llevar a regulaciones más efectivas».
Apoyo bipartidista inesperado
Incluso algunos votantes de Trump cuestionan el ataque a la agencia. Darren Cobb, un gerente de concesionaria jubilado y votante de Trump, recuperó $800 gracias a la intervención de la CFPB en una disputa con su compañía hipotecaria. «No puedes sacar unas tijeras y empezar a cortar sin entender lo que estás cortando», advierte.
A pesar de los ataques, la CFPB ha mostrado resistencia. Un reciente caso ante la Corte Suprema que pretendía desmantelar su financiamiento fracasó por 7 votos contra 2, y la agencia ha continuado su trabajo, limitando las comisiones por sobregiro bancario y eliminando la deuda médica de los informes crediticios de los consumidores.