La última actualización de ChatGPT ha desatado una verdadera «ghiblimanía» en internet, convirtiendo las redes sociales en una galería virtual de ilustraciones inspiradas en el emblemático estudio de animación japonés Studio Ghibli.
Una revolución visual instantánea
El martes 25 de marzo, OpenAI lanzó su generador de imágenes más avanzado, capaz de replicar con precisión el estilo artístico característico de películas como ‘El viaje de Chihiro’ y ‘Mi vecino Totoro’. En cuestión de horas, los usuarios transformaron la plataforma en un espacio de creatividad digital.
Creatividad sin límites
Los usuarios han generado una sorprendente variedad de imágenes, desde:
- Retratos de mascotas
- Reproducciones de momentos históricos
- Memes icónicos
- Incluso el propio CEO de OpenAI, Sam Altman, cambió su foto de perfil por un retrato en estilo Ghibli
Desafíos técnicos y polémica
La demanda ha sido tan intensa que Altman reconoció públicamente: «Nuestras GPUs están que echan humo». La compañía se ha visto obligada a introducir límites temporales de velocidad para gestionar la sobrecarga.
Controversia artística
La capacidad de la IA para imitar estilos artísticos ha generado tensión en la comunidad creativa:
- Más de 11.000 artistas firmaron una carta contra el uso de arte humano para entrenar IA
- Hayao Miyazaki, cofundador de Studio Ghibli, ya había expresado su rechazo a la animación generada por inteligencia artificial
Respuesta de OpenAI
La compañía defiende su posición argumentando que busca «dar a los usuarios la mayor libertad creativa posible», a pesar de enfrentar demandas por posibles infracciones de derechos de autor.
Impacto cultural
Este fenómeno refleja la creciente capacidad de la inteligencia artificial para democratizar la creatividad, generando tanto entusiasmo como debates sobre propiedad intelectual y el futuro del arte digital.