En la madrugada del jueves 19 de junio de 2025, un misil balístico lanzado desde Irán impactó directamente en el Centro Médico Soroka, el hospital más grande del sur de Israel, ubicado en Beerseba. Este ataque causó daños severos en varias áreas del hospital y dejó alrededor de treinta personas heridas. Las autoridades israelíes han pedido a la población evitar la zona debido al riesgo de materiales peligrosos. El Soroka Medical Center, con más de 1,000 camas, atiende a aproximadamente un millón de personas en el sur del país, lo que subraya la gravedad del impacto.
En respuesta, el ejército israelí confirmó un ataque aéreo contra el reactor nuclear de agua pesada de Arak, en el oeste de Irán. Este reactor, que según Israel está diseñado para producir plutonio de alto rendimiento —un material utilizado en armas nucleares— fue atacado específicamente en componentes destinados a la producción de plutonio para impedir que el reactor sea restaurado y utilizado en el desarrollo de armas nucleares. La televisión estatal iraní confirmó el ataque pero aseguró que no hubo peligro de radiación y que la instalación fue evacuada a tiempo, sin daños en áreas civiles cercanas.
Esta jornada se considera una de las más intensas en la escalada de ataques entre Irán e Israel desde que el gobierno de Benjamin Netanyahu inició la ofensiva conocida como Operación León Naciente, que ha incluido bombardeos israelíes contra instalaciones militares y nucleares iraníes, así como ataques iraníes con misiles balísticos contra objetivos civiles en Israel. El primer ministro israelí condenó el ataque al hospital y prometió que harán pagar a los responsables en Teherán.